José Mujica es uno de esos abuelos que me llevaría a casa a merendar. Y lo haría convencida de que luego mi mundo sería mejor. Mucho mejor.
Supongo que es porque me transmite bondad, coherencia e integridad y, en la medida que puedo, me gusta empaparme de ellas. Al fin y al cabo, son excesos de los «saludables», de esos que no tienes que preocuparte de que te hagan el mínimo daño.
El destello de hoy recupera su respuesta cuando le preguntaron qué pensaba sobre el titular de un artículo que había publicado el periódico español ABC sobre él.
El titular era el siguiente: «José Mujica, el Presidente más pobre del mundo».
(OHMMMMMM).
Descubre la riqueza de este abuelo sin igual, y que es grande, admirable e inspiradora.
OBJETIVO 1: Identificar qué es lo que realmente tiene valor para ti. Pregúntate también cuáles son tus conceptos de riqueza y pobreza y hasta qué punto estás viviendo con total sensatez. ¿Hasta qué punto el mundo externo influye en tu manera de vivir?
OBJETIVO 2: Decidir una acción al respecto que vas a llevar a cabo mañana mismo.
AUTOR: José Mujica.
CATEGORÍA: Palabras que iluminan.