Esta idea te va a gustar mucho. Incluso puede que te entusiasme tanto que, cuando termines de leer el destello de hoy, te pongas a buscar opciones para llevarla a cabo en tu barrio. Quién dice barrio, por supuesto, dice también pueblo o ciudad.
Se trata de bibliotecas dónde, en vez de prestar libros, se prestan cosas. ¿Acaso no es genial?
Piénsalo bien: ¿cuántas veces puedes llegar a utilizar el taladro, la mochila, una lija eléctrica, una máquina de coser?
Pues en Londres, ya hay distintos proyectos que han montado como eso, «bibliotecas de cosas» y que por tarifas minúsculas, puedes llevártelos a casa cuando necesites.
Library of things, por ejemplo, nació hace dos años. Al principio, abrían sólo una vez por semana y empezaron con 100 donaciones pero tienen más de 1000 usuarios se organizan talleres y plantean abrir sucursales en otros barrios, incluso en cada calle.
No es tan locura porque si piensas en la cantidad de gente que hay, seguro que entre todos tienen para todos.
Únicamente le veo ventajas:
- Menos trastos en casa.
- Vida social más rica.
- Un guiño al medio ambiente, por todos aquellos trastos que, en vez de ser tirados, son reutilizados.
Hay un proyecto similar, share. Y luego, indagando por ahí, he visto que hay una página de internet que también anima a compartir artilugios entre vecinos: streetbank.
OBJETIVO 1: Reflexionar sobre la idea.
OBJETIVO 2: ¿Se te ocurre poder hacer algo similar en tu barrio?
AUTOR: Library of things.
CATEGORÍA: Ideas para un mundo mejor.