Me gusta este poema prosado, a la vez reflexión y manifiesto.
Y lo hago por muchas y diferentes razones.
Tantas, como las que enumera la autora en los que argumenta por qué opta por leer y sucumbir al encanto y sabiduría de las palabras.
Fue publicado por primera vez en 2013, en el Facebook de El Club de los Libros Perdidos.
El poema fue viralizado en las redes (no me extraña) pero, por esas cosas surrealistas que pasan en la vida, se perdió el nombre de la autora por el camino.
Yo no leo pasó, entonces, a tener múltiples autores y distintas historias: desde aquellos que se lo agenciaban y lo firmaban con su nombre hasta inventar que fue escrito por Santa Juana de La Cruz.
Pero no, y aunque hubiera tenido su gracia que la autora fuera una monja (al fin y al cabo, es una de las máximas figuras hispanoamericanas del siglo XVII) su autora es una estudiante argentina que en 2015 estrenó fotoblog, por si quieres seguirla.
OBJETIVO 1: Y tú, ¿por qué lees? ¿Se encuentra tu razón en la lista?
OBJETIVO 2: ¿Añadirías algún apunte más?
AUTORA: Magalí Frutis.
CATEGORÍA: Textos reveladores que, además, son geniales.
[NOTA POSTERIOR (06.10.16)]: ¡Magalí ya tiene blog y está de estreno!: Proyecto Piezas.