Lo sé, lees 3 Idiotas y hay algunas probabilidades de que el título te eche para atrás y decidas no seguir leyendo este post. Puedes pensar que es ofensivo e insultante y que la película debe ser entre malísima y tonta. O todo ello.
Sí, lo asumo, puede que lo hagas, pero estarás conmigo que, a veces, llegas a una (buena y sorprendente) película totalmente por accidente.
De hecho, te enteras de que existe solo porque pones en Google ‘mejores películas Bollywood’ (tal cual) y te sale. Entonces, te da por mirar su puntuación en imdb y, viendo que tiene más de un 8 (sobre 10, te dices «venga, va, voy darle una oportunidad…».
Y, claro, la buscas, la encuentras y se la das; y no te decepciona; es más, incluso le dedicas un post.
Aquí van 7 pinceladas de la película, 9 lecciones que saco de ella y un mantra para toda la vida.
Eso sí, como siempre, te recomiendo ver la película antes.
7 Pinceladas
- Farhan, Rajú y Rancho se conocen siendo estudiantes en la universidad (estudian ingeniería) y tejen una buena amistad. Uno de sus profesores les etiqueta como «idiotas» (y de ahí el título de la película).
- Los tres amigos provienen de tres familias muy distintas, escogen la carrera por motivos diferentes y sus respectivos futuros serán variopintos.
- 10 años después, Farhan y Rajú se reúnen con Chatur, un antiguo compañero (bastante repelente, por cierto), con el que tenían una apuesta.
- Ante la ausencia de Rancho, Farhan, Rajú y Chatur deciden ir a buscarlo.
- Lo encuentran.
- Descubren un secreto que les deja todo locos.
Batallón de reflexiones: 10 lecciones
#1. Aprende por el simple gozo de aprender.
Sé una esponja y empápate de todo el conocimiento que puedas, sin discriminar ninguna fuente. Tu mente será proporcionalmente poderosa a lo que le des así que no dejes eso, de sembrar en ella y mimarla.
Además, no sabes cuando ese conocimiento puede serte útil o salvar una situación.
No estudies tanto para los exámenes o para los rankings sino porque la educación es el arma más poderosa. Además, siendo un proceso continuo en el que puede aprender algo nuevo cada segundo, imagínate la sabiduría que puedes acumular.
#2. Mantén tus principios, no te vendas.
Rajú decide declinar una oferta de trabajo porque requiere perder su naturaleza honesta y aceptar una diplomacia que no va con su esencia. En la dicotomía de si aceptarlo o no (un trabajo significa dinero y disponer de dinero te facilita la vida) decide seguir sus valores, aunque se quede sin el puesto.
No pasa nada, hay otros trabajos y seguro que llegarán más oportunidades.
Cierto, alguien con menos escrúpulos ocupará su plaza pero depende de nosotros que el sistema siga rulando de forma deshonesta o, por el contrario, empiece a cambiar, tambaléandolo.
Identificados tus valores, síguelos.
#3. Desde la pasión, busca la excelencia.
«No vayas a la caza del éxito, que te cace él» —Rancho.
La reflexión más importante es que el éxito viene y se va, pero la excelencia no dejará nunca de producir éxitos.
No caces el éxito, caza la excelencia.
#4. Dedícate a lo que TÚ ames. Escoge por ti mismo.
Nada más nacer, el padre de Farhan dice «Mi hijo va a ser ingeniero».
Adivina qué acaba estudiando Frahan: ingeniería.
Es normal que las familias quieran lo mejor para sus hijos, pero mejor tener en cuenta las necesidades y pasiones de sus mismos retoños.
Estudiar una carrera que no escoges por voluntad propia puede que te lleve a un sueldo (que tampoco lo asegura) pero, definitivamente, esa decisión tiene muchos números de que traiga insatisfacción.
Al final Farhun apuesta por su verdadera pasión.
#5. Los rankings solo provocan tensión, presión y mucha competición.
La película pone en entredicho el sistema educativo y el ranking de éxito social a los que estamos sometidos desde la infancia.
Los exámenes nunca serán capaces de puntuar el verdadero potencial de un estudiante. Solo conseguirán medirlos en una misma escala que seguramente acabe en el desánimo.
Cada cual tiene un propio ritmo, unas capacidades propias que deberían ser cuidadas y alabadas como tales.
Además, que las comparaciones siempre son odiosas.
En las carreras de ratas, siempre gana una rata. La pregunta es en qué carrera quieres estar tú.
Compite solo contigo mismo, que no es poco.
#6. Sé rebelde.
Lucha por lo que creas injusto de sistema. Edúcate a ti mismo. Aprende. Lee. Lee mucho. Cuestiónalo todo, no te quedes con las dudas, pregunta lo que tengas que preguntar y créate una opinión.
Y punto.
#7. Piensa fuera de la caja.
La necesidad requiere de ingenio y creatividad, primordial cuando te encuentras en situaciones que no has previsto.
La escena en la que una aspiradora pasa de ser un simple objeto a convertirse en solución es más que ilustrativa. Nunca las mirarás igual.
#8. La verdadera amistad es un verdadero tesoro.
Rancho valora tanto la amistad de Farhan y Raju que los prioriza por encima de sus necesidades. Incluso, ayudándolos, se pone en riesgo él mismo.
Rancho reta y anima a partes iguales a sus amigos. Ayuda a Farjan a seguir su pasión (la fotografía), y a Rajú a enfrentarse con sus miedos y el terror que tiene al fracaso.
La buena amistad requiere honestidad y apoyo.
#9. La vida es emoción.
Emociónate y no mueras hasta que tu corazón diga basta. Se trata en vivir al máximo y de aprovechar cada día como un regalo, que lo es.
Y desde la emoción.
La inteligencia y todos los estudios te dan herramientas para vivir, es verdad, pero es tu parte emocional y cómo la manejas que te hace despertar tu parte de genialidad.
La vida no es sencilla pero la sencillez es vida.
La mejor combinación es tener los pies en la tierra y los ojos mirando más allá del cielo.
#10. Aal izz well (= all is well, = todo está bien).
Versión de Rancho para el «everything is ok».
Se trata en confiar, de creer en uno mismo y de dejar fluir más allá de las dificultades que nos vayamos encontrando. Al fin y al cabo, no dejan de ser frutos del miedo.
Y el miedo es el mayor impedimento a tu progreso, a tu aprendizaje, a tu madurez y tu mejor versión.
Teniendo en cuenta que aprendemos del fracaso, de la decepción, de los impedimentos y de las segundas oportunidades, si te caes, levántate y sigue.
Apuntes finales
Pues yo digo que si ser idiota es ser como los 3 protagonistas de esta historia, viva la idiotez.
Sí, la idiotez que alienta a seguir los ideales, a mejorar el mundo y a ser amigo de tus amigos.
En los momentos más duros o más desafiantes, los de bajón, recupera el mantra de Rancho y, para maximizar los efectos, pon tu mano en tu corazón.
Es tu turno para reflexionar: ¿con cuáles de las enseñanzas te quedas? ¿Te has encontrado en la situación de tener que superar una etiqueta? ¿Alguna vez te has sentido traicionándote a ti mismo por unas reglas que no iban contigo?